La inevitable crisis de 2008 es la razón de que exista este libro, en él se reflexiona sobre las causas de esta y pretende que quiénes lo lean entiendan el fenómeno y eviten que se repita
Mariana F. Galán
La figura de Joan Majó i Cruzate, autor de Després de tocar fons, ha estado siempre ligada a la política y a la economía, ya sea en su papel de alcalde de la ciudad de Mataró, como Ministro de Indústria y Energia en 1985, como diputado en el Congreso, como director general de la Corporació Catalana de Ràdio i Televisió antes de su transformación en la CCMA, como consejero asesor de la Unión Europea en materia de telecomunicaciones e informática y un largo etcétera. Joan Majó es también columnista de El País y escritor de obras como El món que ve ja el tenim aquí, No m’ho crec, Luz al final del túnel y, la obra que nos ocupa, Després de tocar fons.
La inevitable crisis de 2008 es la razón de que exista este libro, en él se reflexiona sobre las diversas causas de esta y pretende que quiénes lean el ensayo sean capaces de entender el fenómeno para intentar evitar repetirlo, todo esto a partir de la premisa de que en economía es mucho más sencillo explicar lo que ha pasado que predecir lo que pasará. En esta misma línea, Joan Majó también da una serie de consejos para tapar los agujeros de la crisis de manera estructural y no temporal.
El libro está dividido en dos partes. La primera es el análisis de qué llevó al mundo, y en concreto a España, a entrar en recesión. La respuesta son tres factores clave: En primer lugar, la imposibilidad de mantener los desorbitados niveles de consumo del primer mundo cuando las rentas de la población no crecen y los recursos naturales no son inagotables. En segundo lugar la irresponsabilidad de querer prolongar dicha situación en base al endeudamiento con capacidades de ahorro inexistentes y, finalmente, el papel especulativo del mundo financiero que se convirtió en el corazón de la economía haciendo posibles rentabilidades superiores a las del sector productivo.
Majó hace un paralelismo entre la crisis financiera mundial y la española, pero a diferencia de otros autores que han escrito sobre este fenómeno no considera que una sea consecuencia de la otra, ni que sean iguales, por lo que “no val el mateix remei per malalties diferents”. Señala la crisis de liquidez española como resultado de la explosión de la burbuja inmobiliariofinanciera, del crecimiento exagerado del sector inmobiliario y turístico en la economía nacional. El aumento del desempleo a causa de la crisis es una catástrofe evidente que, según el autor de este libro, solo podrá solucionarse con lo que él llama la aplicación de “una política reactivadora y una política reconversora”, en esencia la creación de nuevos puestos de trabajo que aún no existen y que por tanto se requiere la preparación de infraestructuras públicas y de las capacidades humanas necesarias para el futuro. Joan Majó teje este relato crítico y sencillo alrededor de la evaluación de las acciones que fueron realizando los líderes mundiales y las instituciones responsables de la operación para salir de la crisis, desglosando la utilidad real de cada una de las estrategias puestas en marcha.
En la segunda y tercera parte del libro desarrolla el título del mismo, qué puede hacerse después de tocar fondo, cuáles son las “herramientas para la esperanza”. Recupera y profundiza en la idea de cómo podría reestructurarse el mundo en el que vivímos en base a una economía sostenible, a la utilización de redes de comunicación y, sin duda alguna, partiendo del replanteamiento urgente de nuestros comportamientos sociales, además de la toma de consciencia de nuestras debilidades como humanos, lo dependientes que somos de los recursos naturales y el agotamiento apremiante de estos. Sus respuestas son el ahorro, la eficiencia, combustibles que nos alejen de la situación de dependencia energética actual y sobretodo el acceso a la información.
Quizá lo más agradable de leer Després de tocar fons sea el espíritu crítico del autor, quien es analítico incluso con sus propias propuestas y observaciones. Joan Majó no se presenta ante el lector como un ente superior, poseedor de la verdades absolutas en una materia tan compleja como la economía, es esto lo que le aproxima al lector, lo que les conecta.
Comments